Sí, la familia crece;
estuvo algo estancada durante muchos años,
pero de repente, resurge con un nuevo miembro.
Hoy, Aday, cumple cuatro semanas. En la familia, en estos
últimos 28 días no se habla de otra cosa y mientras tanto,
yo, pasando frío en Tenerife y buscando un hueco
para trasladarme a Lanzarote a hacerle "tropemil" fotos,
arrumacos varios,
"perrerías" dulces,
achuchones y apretones de todo tipo,
y si su madre y su padre me lo permiten
incluso algún zarandeo.
Les dejo con algunas fotos de todos esos momentos de estos últimos meses en los que su madre y su abuela no hicieron otra cosa que MANUALIDADES, con mayúsculas porque tanto una, como la otra, se han dejado las manos, los ojos y la paciencia en lo siguiente:
Las fotos no son muy buenas, pero todo está hecho con la derecha y la izquierda de ellas dos.
¿Qué me dicen de esos ratoncitos corriendo detrás del trozo de queso?
¡Feliz fin de semana!